Las
faenas hay que acabarlas como se empiezan
En
estos tiempos en los que todo vale, será bueno recordar la lección de
coherencia e integridad ética que, durante una feria de abril en la Real
Maestranza sevillana, dio Santiago Martín, El Viti, al intentar terminar
su magistral faena, cuajada de arte y torería, como la había empezado.
Sin
lugar a duda, crítica y público señalaron su faena como la mejor de la feria.
Pero el maestro, finalmente, no pudo conseguir el trofeo, quiso ser consecuente
con su arte. Una faena como la que acababa de ejecutar no podía concluir de
cualquier manera. La muerte del toro a estoque, suerte en la que El Viti
siempre ha sido un maestro consumado, tenía que estar a la altura de las series
de verónicas y pases de muleta con los que había enfervorizado al público.
Así que decidió ejecutar la suerte suprema sin que esta desmereciera ser el
colofón de su excelsa faena. Era preciso acabarla como había comenzado. Así que
decidió rematar de una forma sorprendente: estoquear recibiendo, es decir,
esperando la embestida del toro a pie firme, algo extremadamente arriesgado y
de resultado incierto. Lo intentó, pero el toro no ayudó con una embestida
clara. Lo volvió a intentar varias veces, hasta que recibió un aviso de la
presidencia y tuvo que terminar de un modo deslucido.
A
mi modo de ver, en aquella ocasión, El Viti nos dio una lección de vida,
intentando a toda costa ser consecuente con sus principios y su afán de
superación. No importa el ámbito de concreción en el que impartió su lección:
una corrida de toros, con las que muchos están en contra. Lo verdaderamente
importante es la idea, la sublimación del hecho concreto que podríamos expresar
en una frase: Termina tu tarea sin traicionar los principios que la impulsaron,
sin defraudar a todos los que creyeron en ti. Proponerse hacerlo así, aún a riesgo
de no conseguirlo, honra a todas las personas que lo intentan.
Espero
que estas líneas susciten reflexiones provechosas. Gracias por el tiempo
dedicado a leerlas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario